lunes, 18 de agosto de 2025

Florencia Lobo: PERROS DEL INVIERNO

Llegan noticias de mi ciudad.

Enloquecieron los perros

como enloquecen los vientos

o las flores que nadie mira.


Perros que quizá

una vez fueron Toby

o Negro o Lola

reunidos en las calles

mordiendo el aire

sus sombras

los cuerpos que atraviesan

el reino transparente del invierno.


En geografías lejanas

los hechos extraños duplican

la extrañeza.


¿Se acordará la gente?

¿Se acordará?


Hablo de un verbo en desuso:


acordarse es irse del olvido

y también despertar,

ponerse cuerdo.



sábado, 16 de agosto de 2025

Osvaldo Aguirre: ROMPER EL HIELO

Romper el hielo

era su especialidad.

Contaba intimidades

de la vida familiar,

bromas, grandes pavadas,

era capaz de perder el tiempo

de mil maneras y de pronto

estábamos en medio del tema,

el problema por el que yo

buscaba su consejo,

no sé si más tranquilos

pero al menos relajados.

Podía ganarse la vida

como animador de fiestas,

pero se había recibido

de abogado cum laude.

Cada vez que me encuentro

con personas que hablan mucho

lo recuerdo, esas personas

que no se escuchan y tardan

en darse cuenta de lo que dicen.

Si es que se dan cuenta.

No soportaba a su mujer,

se explayaba al respecto,

pero la idea de levantarse

por la mañana y no ver

a los hijos contenía

las ganas de mandarse

a mudar porque hay cosas,

decía, que pasan una vez

en tu vida y no se repiten.

Esa era su gran lección.

Fue algo que se le escapó,

un pensamiento en voz alta

que no me iba a servir,

más bien lo contrario,

todo lo contrario, tanto

que no lo puedo olvidar.

Sé lo que hago, entonces,

cuando me alejo de los que hablan

y te dejan solo con lo que dijeron,

un peso imposible de levantar.



Débora Dricas: "la pequeña bailarina"

en audiciones y clases

esa niña muere

muere para ser

niña con hambre


el telón levanta

esa niña renace

cisne blanco 

en puntas de pie


cae el telón

la indiferencia

cisne negro

ahora es de bronce


A partir de una obra de Degas, "La pequeña bailarina de catorce años".



miércoles, 13 de agosto de 2025

Raúl Orlando Artola: ESCRIBIR ES UN ACTO DE AMOR

Escribir es igual que amar. Es tan difícil como amar. No se puede enseñar

ni se termina de aprender nunca.

 

Cada vez hay que empezar de cero. Cada acto de escritura o de amor son

únicos y la experiencia no sirve para nada. Siempre somos aprendices.

 

Podemos cometer menos torpezas con el tiempo: no se puede avanzar

mucho más.


Las dificultades son siempre las mismas: qué hacer, cómo decir, para que

lo que hagamos, para que lo que digamos, sea verdadero, no tenga al ego

por delante, les sirva a otros y sea digno de recordar.

 

Ah, y que la empresa no nos fatigue tanto como para hacernos creer

que ya no vale la pena.



Michaela Osorio: EXILIO

Armando las valijas, desarmo el corazón

sé que tengo que llevarlos a los cuatro, lo imprescindible

Ernesto no quiere, se niega a irse

no puedo obligarlo.

.


Mientras guardo apurada todas mis cosas, llorando,

pienso que me llevo todas mis tristezas

pero también todas mis alegrías.

.


Voy a la biblioteca y busco un diccionario,

voy a necesitarlo

para poder hablar esa lengua otra,

que desconozco pero tengo que aprender.

.


Me llevo algunos libros y mis perfumes

guardo poca ropa, la valija tiene que ir con lo justo.

.


Busco un mapa, necesito entender a qué país me estoy yendo

y saber que al regresar

ya no seré la misma

ni podré reparar

todo lo que en el viaje

se rompió.

.



martes, 12 de agosto de 2025

Enrique Butti: "la llegada de la poesía"

Escucho y escucho teorías, dijo,

atendí durante toda mi vida

a teorías

sobre cómo predisponerse

a la llegada de la poesía,

pero jamás nadie

me anticipó

que podía llegar un momento

en que tendría que encontrar la manera

de escapar de ella.


Plantándose delante

con sus túnicas y sonajeros

su lengua de ahorcada

su bocina de victrola

siempre inoportuna

cuando yo me tiro, dijo,

para conectarme al respirador,

cuando me caigo

en los primeros brazos que encuentro

para conectarme

a un corazón artificial

cuando me despierta

el grito de mis sueños

ahí está

en el medio

tirándome la manga,

haciéndome una zancadilla,

la bobita

parlanchina.


Como la fama

que sólo ama a quien la desprecia,

la poesía sólo visita

a quien

alguna vez la cortejó

y ahora tiene otras urgencias.

Y entonces

o la echas a patadas

o te ahoga.



lunes, 11 de agosto de 2025

Ohuanta Salazar: nombre originario

Supe que mi bisabuela Rivella vino de Italia pero

yo ando buscando mi nombre diaguita-calchaquí

y no hallo embajada donde acudir.


Sé que ahí están, esos genes, cada vez

que suena el viento como siku entre las cañas

y en la piel trigueña de mi padre Salazar

o en la nariz de mi abuelo González y en esa

sabiduría de yuyos de mi bisabuela Sánchez Paz.


¿Quién habrá sido mi tataratatarabuela y la abuela de su abuela?


Acaso una niña allá, en Ibatín, sometida

por  los changos de Diego de Villarröel

o la habrá matado el paludismo, el hambre o

la zafra bajo el sol.


Tal vez fue una alfarera o tejedora o estuvo

en los cerros resistiendo, montonera

y en los valles o el monte parió a una guagüita mestiza

y le cantó, bajo la luna, la canción de sus ancestros,

nombrándola al oído: Killawarmi o Intihuasi,

hasta que algún criollo la anotó: María o Josefa o Silvia.


Ando buscando mi nombre diaguita-calchaquí y por ahora

para no engañar tanto a mi sangre, me bautizo

con un nombre que recuerdo susurrado a mi oído: Ohuanta,

el hogar de mis abuelos, al pie de los cerros verdeazules,

tierra adentro.



 

Florencia Lobo: PERROS DEL INVIERNO

Llegan noticias de mi ciudad. Enloquecieron los perros como enloquecen los vientos o las flores que nadie mira. Perros que quizá una vez fue...